Mis propias estaciones

 Estoy disfrutando de un clima fresco, finalmente. 

Despues de 40 grados centígrados de sensación térmica el fresco es mas que bienvenido.

Claro, no falta alguna voz quejándose, será la misma que se quejaba con el calor y que se quejará cuando haga frío o llueva?

En fin, me hizo reflexionar como tambien tengo estaciones en mi vida personal y llegué a estas conclusiones.

La primavera puede ser vista como una época de renovación y crecimiento. En nuestras vidas personales y laborales, la primavera podría representar un período de nuevas oportunidades y posibilidades. Podemos sentir un impulso para probar cosas nuevas, asumir riesgos y explorar nuevas áreas de interés.

También es un momento de renovación y de plantar las semillas para un futuro prometedor. 

Atención aquí, plantar, ocuparnos de nuestras relaciones, nuestra profesión para poder cosechar cuando sea el momento.

El verano suele ser una época de calor intenso y de disfrute del tiempo libre. En la vida personal, el verano puede simbolizar el apogeo de una relación o la realización de un sueño o proyecto. En el ámbito laboral, el verano puede ser un momento de máxima actividad, con el objetivo de cumplir con los objetivos y metas establecidos, También de comenzar a ver los frutos de lo sembrado.

Obviamente nos invita a disfrutar, es muy agradable para actividades outdor.  En nuestras vidas, el verano puede ser un tiempo de alta actividad, en el que estamos ocupados con nuevos  proyectos, viajes y actividades sociales. También puede ser un momento ideal para relajarnos y hacer  las cosas que nos gustan. Llegan las fiestas y podemos estar con la gente amada, disfrutar de reuniones amenas, y de los amigos.

 El otoño es una época de transición, de cambio de color y de caída de las hojas.Te cuento que es mi época favorita del año.

 En la vida personal, el otoño puede ser aquellos momentos de reflexión y de evaluación de lo logrado hasta ahora. En el ámbito laboral, el otoño puede representar la finalización de un proyecto y la preparación para un nuevo ciclo. Es un momento para soltar lo que ya no nos sirve y prepararnos para la siguiente etapa. ¡Que maravillosa oportunidad!

El invierno suele ser una época de frío y de introspección. 

Es una época de tranquilidad y descanso, pero también puede ser un momento de aprender de las dificultades y los desafíos. En nuestras vidas, el invierno puede ser ese momento de reflexión profunda y de reconocer nuestras debilidades, mientras estamos trabajando y potenciando nuestros puntos fuertes. Podemos utilizar el tiempo de inactividad (ya que no estamos sembrando y lo estaremos próximamente)  para pensar en nuestros objetivos y hacer planes para el futuro, reconectar con nuevos sueños o sueños olvidados. Es un tiempo para escucharnos y buscar lo que nos inspira, hacer feliz y reconectar con los afectos.

Y así va la vida, pasamos de una estación a otra, y entre tantos cambios, cual es la clave para no estrasarnos? 

Disfrutar, entender que es una temporada, que comienza y también termina.

Como coach profesional me encanta acompañarte para que disfrutes tu temporada y te prepares para la próxima.